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Organización Campesina Inaugura su Parcela Comunitaria



El ritmo de los tambores, el sabor del bollo de yuca, y de la mazorza cocida,  las imágenes de los cultivos de ñame, yuca, maíz, ají, los sonidos de vacas, gallinas y cerdos se pudieron sentir el pasado 29 de Julio durante la inauguración de la Parcela Comunitaria Puerto Luna, en la vereda La Suprema del municipio de María la Baja.

“Nosotros no teníamos donde trabajar, estábamos luchando como ASOPRINI por tener la tierrita, ahora ya la tenemos, hoy es una alegría porque tenemos donde cultivar la comida para nuestros hijos” expresa una de las mujeres integrantes de la Asociación Primero Los Niños, conformada en su gran mayoría por mujeres en situación de desplazamiento.

“Este día es muy importante, porque por fin tenemos una tierra donde cultivar  y lo hacemos nosotras mismas,  aquí las mujeres cogemos las botas, las rula y a sembrar lo que sea, yuca, ñame. Si tenemos que buscar la leña, el agua, lo hacemos. Esta parcela significa tener una mejor calidad de vida, tener los alimentos que queremos, y tener platica porque podemos vender el ñame” afirma con una gran sonrisa, Luz Helena, otra de las mujeres que han hecho posible este sueño colectivo.

Acto simbólico
En una región, donde la tierra se concentra en pocas manos y la diversificación de la producción campesina da paso a grandes extensiones de monocultivos, la apuesta por las Parcelas comunitarias “son una estrategia que busca garantizar la seguridad alimentaria de la población, fortalecer la organización campesina y  promover una economía campesina acorde con las necesidades y enfoques de esta población. Además, se implementan propuestas productivas que son amigables con el medio ambiente” expresa Guillermo Anaya, Coordinador del Programa Técnico-productivo de la Corporación Desarrollo Solidario, organización acompañante de este proceso.

Julian uno de los pocos hombres que integran esta organización, nos cuenta de sus sentires, mientras señala con orgullo sus cultivos:  “Este maíz es negrito, está seco porque lo estoy dejando para coger semilla, porque nuestro maíz es criollo. Cuando nos dijeron que la parcela era de nosotros ese fue el mejor momento de mi vida. Aquí las mujeres son mayoría, en este pedacito que tenemos ellas tienen más influencia, porque solo somos tres hombres, pero ellas son del campo, y ustedes las pueden ver  entre el monte con nosotros, porque aqui todo el mundo se pone las botas, aquí todos trabajamos por igual”

La parcela comunitaria Puerto Luna, está integrada por propuestas familiares y colectivas,  que no solo se proyecta  beneficiar a los miembros de la organización sino a la comunidad de la vereda la Suprema, como lo confirma otro de los integrantes de ASOPRINI, “ Toda la vereda se beneficia, porque  antes salíamos a buscar  bastimento y no había, pero hoy cualquier persona va a la casa de los socios y si no hay, venimos a la Parcela a buscarlo en seguida, tampoco les vendemos muy caro y también les acreditamos. A nosotros nos duele en el alma que en la comunidad hay niños que nacieron y no saben lo que es la leche de ganado, sino en la bolsita, ahora ya podemos decir que pa diciembre podemos beber leche pura, y abastecer a la Red de Frutas y Lacteos con la que trabajamos”.

El fomento de la  economía campesina, es de vital importancia para un  municipio como María la Baja, que ha disminuido notablemente la  producción de alimentos,  que en su momento le dio el título a este municipio, de despensa agrícola.  Propuestas como Puerto Luna, son el sueño de diversas organizaciones campesinas de la región,  que representa de forma clara el ejercicio del derecho a la tierra y al territorio.  

NOTA: La Parcela Comunitaria, ha contado con el apoyo de diversas organizaciones: INTERMON-OXFAM, Agencia Catalana de Cooperación al Desarrollo, MPDL, AECID, Lutheran World Relief, ACNUR,  CORDAID.

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